sábado, 31 de diciembre de 2011

Hoy

Pase lo que pase mañana, tuvimos hoy. La oportunidad de encontrarnos, de estar juntos hoy hace que no tema lo que suceda mañana. Ya no voy a preocuparme por lo que suceda luego del alba sé que antes de eso, estuviste aquí, conmigo. Ya no pensaré en los problemas venideros porque existió un hoy, un ahora que hace que todo quede supeditado a los instantes que vivimos juntos.
Pase lo que pase mañana, tuvimos muchos hoy, muchos encuentros donde nada importaba más que nosotros dos. Más que vos, más que yo. Donde los presagios y las posibilidades fueron imposibles pero los hechos demostraron lo contrario. Pase lo que pase siempre estará éste momento donde mis ojos pueden verte y mi mente recordarte pero, aun mejor, mi corazón para revivirte las veces que quiera.
Se perderán en el tiempo muchos de los recuerdos pero no podrá borrarse ni mucho menos,  extraviarse cada sensación de hoy. Aunque mañana hagamos un nuevo ahora, un nuevo hoy, sé que siempre habrá un hoy que nos mantenga esperanzados que nada perderemos y siempre seremos encontrados. Siempre te encontraré y me encontraras en este instante. Siempre tendremos hoy.

viernes, 30 de diciembre de 2011

Al borde

Estamos al filo de un nuevo año, con todo tipo de historias a cuestas. Con un bagaje importante porque, el hecho de vivir genera sensaciones, pesares, satisfacciones y glorias. Interminables experiencias que, buenas o malas, nos determinaron tal y como somos. A veces entendimos, a veces no. Pero mas allá de todo, queda un nuevo camino marcado. Una colección de deseos apilados en un tintero que, hasta ahora, para lo único que sirve es para acumular. Proyectos que renacen con el almanaque, como las dietas los lunes, que esta vez sí vamos a alcanzar. No se. Puede ser. Solo estamos cerrando un año, empezando otro. No estamos terminando de vivir, no estamos dejando de existir porque cambie el último digito de la fecha.  Estamos esperando que ese 2, en este caso, nos traiga a nuestros pies lo que, hasta hoy, no fuimos capaces de ir a buscar.
El año nuevo renueva, inyecta esperanza, motiva siempre y cuando echemos a rodar los engranajes de nuestra existencia, de nuestra pereza para, al fin, alcanzar el destino deseado.  Por un 2012 que no sea un año más, que este sea EL año.

jueves, 29 de diciembre de 2011

El primer eslabón

El primer eslabón de una cadena es el que va a conseguir que los siguientes no se desprendan del todo. Del origen. Si el primero está dañado, es difícil que cumpla con su objetivo. Si no esta bien asegurado, el todo tambaleara y la suerte de la cadena estará echada. Habrá que ser fuertes desde el principio para no claudicar en el medio.